Israel ejecutó un ataque preciso este jueves que eliminó a Hossein Salami, comandante en jefe de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (IRGC), una figura clave en el régimen iraní, según informó la agencia de noticias Tasnim. El operativo, que también mató a otros altos mandos iraníes y dos científicos nucleares, tuvo lugar en medio de una ofensiva más amplia contra objetivos militares y nucleares en varias regiones de Irán, incluyendo el cuartel general de la IRGC en Teherán.
Este ataque, descrito como una escalada significativa, sigue a la operación preventiva lanzada por el Ejército de Defensa de Israel (IDF) contra el programa nuclear iraní, confirmada horas antes.
La agencia Tasnim, vinculada a la IRGC, reportó que Salami y otros oficiales fueron blanco de lo que parece ser una serie de asesinatos selectivos, con explosiones registradas en áreas como Parchin y complejos residenciales de comandantes en Teherán.
Medios iraníes, incluyendo la televisión estatal, confirmaron las bajas, aunque el gobierno de Irán aún no ha emitido un comunicado oficial. Testigos y videos en redes sociales muestran humo y daños en instalaciones militares, lo que sugiere un impacto considerable, aunque los detalles exactos permanecen inciertos mientras la situación evoluciona.
El ataque ha elevado las tensiones a un punto crítico, con Israel justificándolo como una respuesta al peligro existencial que representa el programa nuclear iraní y la agresión continua de Teherán. Sin embargo, la eliminación de Salami, una figura central en las operaciones militares y de misiles de Irán, podría desatar represalias significativas, especialmente dado el control de la IRGC sobre los arsenales balísticos iraníes.
Estados Unidos, a través del secretario de Estado Marco Rubio, se ha deslindado de los strikes, enfatizando que no participó y advirtiendo a Irán contra atacar intereses estadounidenses, lo que añade complejidad al escenario regional.
A las 8:32 PM CST del 12 de junio de 2025, la región está en alerta máxima. Irán ha prometido una respuesta contundente, y la comunidad internacional, incluyendo la ONU y la Unión Europea, busca contener el riesgo de una guerra abierta.