Janet, que golpeó Quintana Roo en septiembre de 1955, ha sido el más mortífero; provocó 712 decesos
Periódico La Jornada
Jueves 26 de octubre de 2023. Antes de Otis, huracán categoría 5 en la escala de Saffir-Simpson, la máxima, siete ciclones devastadores azotaron México de 1955 a la fecha, de acuerdo con el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred).
El meteoro más mortífero ha sido Janet, que golpeó Quintana Roo en la categoría 5 el 27 de septiembre de 1955, y dejó 712 personas muertas. La ciudad más afectada fue Chetumal, capital de la entidad, donde prácticamente se perdieron todas las viviendas, la mayoría de ellas construidas con madera.
El 30 de septiembre de 1976 el huracán Liza impactó Baja California y Sonora en categoría 4, con un saldo de alrededor de 630 fallecidos y 10 mil damnificados.
El huracán Gilberto tocó tierra en categoría 5 el 14 de septiembre de 1988 en la isla de Cozumel. Arrasó Cancún, regresó al Atlántico, donde tomó fuerza y azotó como tormenta tropical Nuevo León y Coahuila. Dejó unos 225 muertos, la gran mayoría en Monterrey, donde desbordó el río Santa Catarina, y provocó unos 139 mil damnificados.
Entre el 5 y 10 octubre de 1997, Paulina dejó a su paso 228 personas sin vida y más de 150 mil damnificados. Tocó tierra en Chiapas, devastó Puerto Escondido, en Oaxaca, y Acapulco, Guerrero; además, golpeó una de las regiones más pobres de México con crecientes de los ríos y deslaves.
▲ Muchas torres de departamentos en las zonas Dorada y Diamante sufrieron la pérdida de sus cristales, debido a la lluvia y los vientos de más de 300 kilómetros por hora.
Stan entró por Veracruz en octubre de 2005, recorrió Chiapas y Oaxaca, donde ocasionó 82 decesos; luego pasó por Centroamérica, propiciando más de 730 muertos en Guatemala, El Salvador, Nicaragua, Honduras y Costa Rica.
Wilma impactó la isla de Cozumel el 21 de octubre de 2005 en categoría 4, y embistió por más de 48 horas a Cancún y la Riviera Maya. Casi 98 por ciento de la infraestructura turística resultó perjudicada. Hasta ahora, sigue siendo el desastre natural más costoso en la historia de México (mil 752 millones de dólares).
Ocasionó la pérdida de entre 4.5 millones y 6 millones de metros cúbicos de arena en una franja de 11.6 kilómetros. Los gobiernos federal y estatal invirtieron casi mil millones de pesos para colocar unos 9.4 millones de metros cúbicos de playa.
Del 13 al 20 de septiembre de 2013, el huracán Manuel –en convergencia con el huracán Ingrid– dejó 123 víctimas mortales, 97 de ellas por un alud que sepultó la mitad de la comunidad La Pintada, municipio de Atoyac de Álvarez, en Guerrero. También afectó Coahuila, Chihuahua y Durango