Zipolite, un foro que va en ascenso para difundir el arte drag

EL UNIVERSAL

Fernando Miranda 

 Pochutla.— Zara con Z fue la primera mujer trans en instalarse en Zipolite. Tras una década y media recorriendo el país, empapándose del mundo del show y el transformismo, llegó hace seis años y plantó en la arena una enorme bandera con los colores del arcoíris. Así nació La Máxima, el primer espacio abiertamente pensado para la comunidad de la diversidad sexual en esta playa que se precia de tener un lugar para todos

.Originaria de Puerto Escondido, Zara primero fue una reina de belleza que representó a Oaxaca a nivel nacional y, posteriormente, se dedicó al travestismo y a la promoción del arte de la transformación; finalmente, dio el paso y se convertió en empresaria en Zipolite. Llegó a este punto de la Costa de Oaxaca, confiesa, atraída por los aires de libertad que emanaba la única playa nudista del país. “Me empezó a gustar y comencé a involucrarme, yo también hacía esto, antes llamado travestismo. Tenía conocimiento de que Zipolite era playa nudista y me pidieron que viniera a dar un show, así llegué”.

Zara recuerda que la decisión de instalarse en esta playa se debió a todo lo que se escuchaba sobre ella, pero también al cansancio e incluso a la desesperación de ir tocando puertas en todo el país para encontrar espacios apropiados para el arte de la transformación, así que combinando su pasión y sus estudios sobre turismo comenzó su aventura con tours hasta que logró abrir su propio espacio.

“Visualicé lo que quería aquí, algo diferente a lo que hay en Vallarta o Cancún. Dije: ‘Si lo voy a hacer, lo voy a hacer bien’. Fui creando este espacio porque vi toda la afluencia de la comunidad LGBT y vi que era necesario. Quería traer esa propuesta de los shows porque no había”, cuenta a EL UNIVERSAL.

En los seis años que han pasado desde entonces, Zipolite y La Máxima se han ido posicionando en la escena drag como uno de los nuevos escenarios para este arte, e incluso han abierto la puerta para otros negocios, como La Patrona. Desde entonces, también el público que acompaña a Zara se ha mantenido arropándola en este proceso, en el cual la empresaria también ha logrado el respeto de la comunidad. “Ha sido un trabajo de resistencia, perseverancia y disciplina. Hay temporadas muy bajas, lluvias, luego [vino] la pandemia y el huracán. El pueblo te tiene que arropar y tienes que ganarte su respeto, algo que no es tan fácil en un pueblo de usos y costumbres, que no estaban acostumbrados a ver una chica trans”, cuenta.

Zara dice que durante estos años en los que el drag ha ido ganando presencia, ella como empresaria se ha dedicado tanto a promover este espacio como a traer a talento de todo el país, y actualmente estima que al menos 30 artistas drag top se han presentado en este escenario, incluidas participantes del programa La Más Draga.

Show y aceptación

Mientras se maquillan y alistan para salir a escena, Sofía Jiménez, Ariel y Alfa Lady Drag Queen coinciden en el camerino, desde el que se oye el bullicio de la fiesta y se siente el calor y la humedad de estar a unos metros del mar.

Están a minutos de presentarse en el escenario de La Máxima, sitio pionero del drag y que, con base en estos shows, ha atraído a turismo de la diversidad de todo el país y del extranjero.

Sofía y Ariel debutan esta noche. Es la primera vez que estas “reinas drags” y transformistas se presentan en suelo oaxaqueño y ambas coinciden en que, de boca a boca, Zipolite se ha convertido en un importante referente de inclusión, pero sobre todo en un foro para el arte drag del cual hay que estar pendientes.

 En el caso de Alfa Lady Drag Queen, de la Ciudad de México, es el sexto año que regresa a este escenario a la orilla del mar. Narra que en estos años la escena drag ha despuntado, pero afirma que la importancia de esto es su aporte a la aceptación. “Zipolite es la playa nudista más importante de México y la población local se ha ido adaptando a esta ola gay. Siempre ha sido bueno, pero ahora es mucho más grande la aceptación. Ahora sí me atrevo a decir que es una playa LGBT-friendly, se ha convertido en un referente mundial”, añade.

Pese a estos avances, Zara y las artistas saben que la lucha por la inclusión no está ganada. Es por eso que agradecen a quienes han creído en este proyecto.