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Cd. de México (12 marzo 2023).- En una victoria que todos veían como segura e indiscutible, el mexicano Guillermo del Toro se agenció el tercer Óscar de su carrera, ahora en la categoría de Mejor Película Animada, por su ovacionada Pinocho.
“La animación es cine, no es un género y la animación está lista para que la llevemos al siguiente nivel. Por favor, hagámoslo posible, sigan hablando de la animación”.
“Gracias a Netflix y a Ted Sarandos por creer en la película. Quiero dedicar este premio al amor de mi vida, a mi esposa Kim, a mis hijos y a mis padres, que no están conmigo está noche. Yo soy su hijo y los amo. Gracias”, señaló el cineasta mexicano al subir al escenario por su estatuilla.
Pinocho de Guillermo del Toro competía en la categoría contra Marcel the Shell With Shoes On, Red, The Sea Beast y Gato Con Botas: El Último Deseo.
Este filme le dio al realizador su sexta nominación al Óscar. La primera llegó en 2007, con El Laberinto del Fauno. En 2018, La Forma del Agua le dio sus primeras dos estatuillas doradas, por Mejor Película y Mejor Dirección. Y apenas el año pasado, El Callejón de las Almas Perdidas lo puso de nueva cuenta en la contienda.
Tapatío de corazón, Guillermo del Toro estudió en el Centro de Investigación y Estudios Cinematográficos en la Universidad de Guadalajara, donde publicó su primer libro, una pequeña biografía sobre Alfred Hitchcock, uno de sus grandes ídolos.
Su amor por el cine inició a los 8 años, cuando comenzó a hacer cortometrajes con una cámara Super 8 y sus juguetes. En sus veinte, inicio su carrera profesional en televisión al dirigir un par de episodios de la serie La Hora Marcada, donde conoció al cinefotógrafo Emmanuel Lubezki y al cineasta Alfonso Cuarón.
En 1993 debutó formalmente en cine con su primer largometraje, Cronos, un drama de horror que eventualmente lo empujó a Hollywood. Curiosamente, antes de Cronos, su primer proyecto de largo formato iba a ser originalmente una película en stop-motion, para la cual ya había construido sets y marionetas, pero debido a un asalto a su estudio, todo el trabajó quedó destruido y nunca avanzó.
Treinta años después, Del Toro finalmente logró materializar su amor por el stop-motion con un proyecto largamente acariciado: una versión adulta y oscura de Pinocho, uno de sus relatos favoritos de toda al vida. Con la ayuda de Netflix, el mexicano creó una épica animada que se convirtió en 2022 en una de las cintas animadas más galardonadas de la historia.
Con este Óscar, Pinocho ya acumula 70 premios internacionales, incluyendo además un BAFTA, cinco Annies, un Globo de Oro y un Critic’s Choice Award. Creada en parte en El Taller de Chucho, un estudio de animación germinado en Guadalajara con apoyo del propio Del Toro, Pinocho es una cinta internacional con mucho corazón mexicano.