Juan Manuel López García.
Recordando a los tres amigos que vivieron bajo el lema todo para uno y uno para todos sirvieron al Rey Luis XIII quienes se enfrentan al ministro Richeliu, que surgen en la atractiva novela francesa escrita por Alejandro Dumas que nos entusiasmó de infantes, que posteriormente se adaptó al cine y la televisión, siendo unos destacados soldados de infantería armados con un mosquete. Así trasladándonos al siglo que estamos presentes, existen en parangón seres que combaten desde su oficio o profesión, las batallas para lograr salir avantes contra cualquier mal, que en esta segunda semana de julio nos enteramos de noticias gratas entre tantas pesadumbres que nos aquejan en un México convulsionado. La primera que bien vale destacar es el esclarecimiento de un robo peculiar en la Plaza Antara en la bonita Zona de Polanco en la Ciudad de México, a cargo de unos maleantes que tuvieron la osadía de perpetrar una joyería, en la que se venden relojes Rolex, en plena luz del día y ante la vista de cientos de personas que estaban en ese eximio centro comercial, los que con hachas y mazos rompieron los exhibidores donde se exhibían los atractivos relojes. Causando conmoción a la ciudadanía el grado de inseguridad que impera en la Capital de la República, que en cualquier momento cualquiera puede ser asaltado y más en un centro tan cosmopolita, que muchas ocasiones tiene la oportunidad éste relator de acudir con su adorado Tigre, quien vive cerca de esa colonia, para esparcir el espíritu. Ello aumentó mi preocupación e interés de saber del resultado de las pesquisas para indagar sobre la captura de los maleantes.
Que al enterarme le comenté a mi hijo y le dije ten la certeza que ese robo no quedará impune, que mediante un tuiter con fecha 26 de junio del año cursante escribió el secretario que haría justicia y esos ladrones serìan detenidos. Al día siguiente informó en otro Tuiter Omar García Harfuch que “ya se había logrado la primera detención, después de realizar varias operaciones durante la noche. Faltan más personas por detener y este hecho no quedará impune en nuestra Ciudad. Todos serán detenidos” Así lo aseguró. Con fecha 3 de julio de este mismo mes en un tercer tuiter escribió que “detuvieron al segundo responsable de participar en el robo de Antara, reiterando el compromiso de detener a todos los responsables de ese hecho lamentable que robó la paz a muchos ciudadanos”. Y así vi como escuché a Omar García Harfuch, Secretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México en un video, en el que informó sobre los avances del referido asalto que fue capturado un colombiano entre ellos, quien cuenta con antecedentes de robo con violencia en el año del 2017 y 2020 por delitos contra la salud, incluye en esas tres detenciones al autor intelectual, agradeció a la fiscalía de la Ciudad de México y al CNI ( Centro Nacional de Inteligencia) por su participación en conjunto, refrendando su compromiso de tener una policía alerta y que van a detener a todos los implicados de ese evento violento.
Dando tranquilidad que se cuenta con un funcionario de valor cuya trayectoria ha sido fructífera que esté actualmente al frente de la gigantesca Ciudad de México, quien recibió artero ataque en su persona en Paseo de la Reforma que milagrosamente sobrevivió, y ello no ha sido obstáculo para continuar con su misión, denotando tener agallas e inteligencia que con más ímpetu enfrenta a los delincuentes.
Así también gran gusto causó a este escribidor, que el 12 de julio que se celebró el Día del Abogado, un eminente jurista Doctor en derecho Constitucional Alejandro González Bernabé, Consejero de la Judicatura del Poder Judicial Federal, fue entregado un galardón por su excelente y notable trayectoria académica y profesional, otorgado por el Claustro Nacional de Doctores Honoris Causa, siendo su presidente el Dr. Roberto Vidal.
Siempre ha sido un amasio del estudio, destacando desde su años de estudiante universitario, por su mente ágil, claridad en comprensión de la teoría de las materias de la noble carrera, siempre solidario, y de trato cordial, de gran sensibilidad, ajeno al engreimiento, cuya personalidad y talento lo ha llevado a la cima del derecho actuando con imparcialidad en forma perenne. Desde su vida como estudiante y luego como pasante de derecho en el despacho el ínclito Maestro Roberto Pedro Martínez Ortiz, sobresalió por rapidez en el aprendizaje de la praxis del litigio, abrazando siempre la judicatura, que por exámenes de oposición logró ingresar al Poder Judicial Federal. Inspirado por su padre, Don Francisco González, acucioso Secretario Judicial de múltiples juzgados del Poder Judicial del Estado de Oaxaca, quien despachaba con diligencia los asuntos tanto en materia civil como penal.
Conocí a Xóchitl Gálvez durante una de sus múltiples visitas a Oaxaca, en los años que era gobernador José Murat, quien asistió en representación de Vicente Fox, presidente de México en esa época, escuchando sus conceptos y labor a favor de los indígenas que ella presidía la CDI, que ahora es su titular Adelfo Regino Montes. De gran ayuda para las obras de caminos, agua de las comunidades de alta marginación, muchas que he caminado y visto las mejorías de mis paisanos.
Por razón de espacio le paro a mi pianola como decía el extinto Germán Dehesa, con el oxígeno que tenemos baluartes en nuestra Nación de la talla descrita de Omar García Harfuch, Alejandro González Bernabé y Xóchitl Gálvez Mosqueteros en seguridad pública, justicia y política.
Jugadas de la Vida.
Los Beatles utilizaron la palabra “LOVE” 613 veces en sus canciones.
Twitter: @ldojuanmanuel
Andrés Manuel López Obrador puede ser muchas cosas, pero es un animal político como pocos. El presidente goza de un olfato privilegiado. Sabe que puede echarle el carro a Carlos Loret, pero debe tener cuidado con Televisa. Sabe que puede meterse con Claudio X. González, pero aguas con Carlos Slim o Ricardo Salinas Pliego. Entiende en donde están los límites materiales de su poder. Y también sabe cuándo aparece alguien en el escenario político que puede poner la continuidad de su proyecto en entredicho.
No me sorprende que el López Obrador del presidente le siga corrigiendo la plana al López Obrador del pasado. Ninguna oposición ha sido más efectiva que recuperar las opiniones que hace algunos años sostenía el presidente. El López Obrador del presente pasó de ser perseguido a persecutor. A través de información no contrastada, el presidente demostró su principal arma rumbo a 2024: la destrucción de la credibilidad de quien aspire seriamente a sucederlo por parte de la oposición. Quieren acabar con Xóchitl Gálvez antes de que su ascenso sea incontrolable.
La diferencia entre una democracia de calidad, con estado de derecho e instituciones independientes, y un sistema híbrido -como es calificado México por The Economist-, es precisamente la independencia de la justicia. En las democracias de calidad se investiga a quien se debe investigar y en el momento en que aparecen los indicios de la comisión de algún delito. Se procura atajar los delitos sin importar si estamos hablando de políticos, ingenieros o astronautas. La venda que suele simbolizar la imparcialidad de la justicia.
Esta semana, López Obrador salió a la mañanera para despotricar contra Xóchitl Gálvez. Le acusa de haber recibido contratos por mil 400 millones de pesos. Incluso, admite la paradoja de que su propio Gobierno le otorgó contratos. Lo admite con una frase que lo desnuda de cuerpo entero: “Claro que no sabíamos que las empresas eran suyas”. Es decir, si hubiéramos sabido que eran de ella, nunca le hubiéramos entregado contrato alguno. A este punto llega el cinismo presidencial. Con tal de atacar a su contrincante, el presidente admitió el uso político y discrecional de las contrataciones del Gobierno. Un chiste de mal gusto para una administración que se decía distinta.
Los regímenes autoritarios permiten la corrupción siempre y cuando los corruptos no se metan en la disputa del poder político. Esto le sonará a usted. Es la fórmula del PRI. Mientras los empresarios se dedicaran a los negocios y no a la política, el régimen permitía toda clase de atropellos. Así es la relación que mantiene Vladimir Putin con los magnates rusos. El poder político es mío, dice el presidente. Si la información es veraz, ¿por qué en cinco años nunca hicieron pública la información? ¿Por qué aparece justo cuando Xóchitl Gálvez apunta a ser una adversaria seria en 2024? Simple: porque la justicia mexicana danza al son de las prioridades de López Obrador. Hoy, el objetivo es destruir a la senadora desde el arranque mismo.
López Obrador sabe que es un riesgo que Xóchitl Gálvez llegue viva a septiembre. A veces me preguntan si el efecto Xóchitl es una mera burbuja o si realmente tiene profundidad. La respuesta es sencilla: no existía como candidata presidencial y hoy todas las encuestas la ponen o por encima o empatada en la interna del Frente por México. En tres semanas logró rebasar a candidatos que llevan meses placeándose por el país. Y segundo, ¿López Obrador perdería su tiempo con una candidata no competitiva? ¿Lo ha hecho con Claudia Ruiz, Beatriz Paredes o Santiago Creel? El presidente es un obsesionado de las encuestas y seguro tiene en su escritorio varias que le dicen que está en problemas.
En este escenario, Xóchitl se enfrenta a tres desafíos que no son menores. Primero: el tiempo. La paradoja del tiempo en la política. Hace semanas parecía que no había tiempo suficiente para construir un candidato ganador a la Presidencia. Sin embargo, hoy, a Xóchitl se le puede hacer largo el partido si cae en el ritmo de López Obrador. Con sus acusaciones, el presidente logró poner a la aspirante presidencial a la defensiva. Tener que explicar sus contratos con la administración pública. La comunicación de López Obrador ha sido muy efectiva y termina rompiendo la resistencia de sus adversarios. Alito, es un ejemplo del acoso permanente.
Segundo desafío: aclarar las cuentas e ir incluso más allá en materia de transparencia. La estrategia del presidente para destruir a la oposición es vincularla con el pasado más oscuro de México: la corrupción y la impunidad. La oposición no puede tener una candidata que tenga sospechas de haberse beneficiado del Gobierno. Eso es política y éticamente reprobable. Es cierto que quien acusa debe probar, pero Xóchitl debe dejar en claro toda su información. Si no lo hace en este momento, la estrategia para destruirla se prolongará.
Y tercer desafío: arreglar la casa. El protagonismo de las cúpulas partidistas le resta a Xóchitl Gálvez. Si se enreda en las políticas palaciegas, puede pasar de un prometedor ascenso a una decepción manifiesta en pocos meses. Gálvez no puede ser parte de un proceso interno en donde parezca que son las cúpulas partidistas o económicas las que deciden su candidatura. La transversalidad de una candidatura se construye quitándole peso a los Alitos y Marquitos. Sólo estorban. Ellos deberían entenderlo.
Más allá de lo que venga en próximas semanas, no tengo la menor duda que se ha activado una operación de Estado para descarrilar y destruir a Xóchitl Gálvez. Y esa operación no nace en el vacío, sino como respuestas a los datos que dejan en claro que el crecimiento de Xóchitl no es un invento de los medios de comunicación, sino una realidad que comienzan a marcar las encuestas. En todo este escenario, Claudia Sheinbaum se ha desinflado dramáticamente. No emociona ni a los suyos. López Obrador se ha propuesto destruir a Xóchitl antes que ponga en riesgo la elección de 2024.