Juan Martínez Ferra
Oaxaca.- Desde el pasado sábado, el centro histórico de la ciudad de Oaxaca se volvió a llenar de puestos de vendedores ambulantes.
Toda la calle de Gurrión, a un costado de la iglesia y ex convento de Santo Domingo de Guzmán, se encuentra atestado de estructuras metálicas y expendio de ropa presuntamente típica.
Por el momento se desconoce qué autoridad autorizó la colocación de ambulantes, pero se trata del ayuntamiento de Oaxaca de Juárez quien tiene la responsabilidad de autorizar o retirar los puestos informales, que no cuentan con permisos, de las calles de la ciudad.
Presuntamente son una grupo de indígenas triquis que fueron retirados de manera violenta el pasado viernes por la madrugada del zócalo y el Palacio de Gobierno; sin embargo hasta el momento la autoridad municipal no ha emitido ningun comunicado al respecto.