Opinión
Por Erika Spezia
¿No les ha pasado que en las charlas de café siempre aparece el tema de la situación política actual?, unos a favor del régimen actual y otros en contra cobran horas interminables de debate… exacerbado estas ultimas semanas por el fenómeno de las marchas.
Si pones atención encontrarás quienes disfrutan analizando profusamente los frentes, las posiciones y los partidos políticos, que si las alianzas de unos y otros, que si los quebrantos por los que atraviesan; los mas audaces, incluso hacen pronósticos de quien será designado como el abanderado del partido gobernante, o quien representará a los llamados opositores para la silla presidencial y para las sillas de gobernadores. El 2024 acapara todas las deliberaciones, y todos coinciden que el 2023 será un ensayo muy revelador.
En algún punto cada postura puede ser vencedora o vencida, lo que resulta lógico en una contienda como la que está por iniciar.
Sin embargo, nadie habla del gran ganador en la política actual, nadie por alguna razón lo ubica en ese pedestal de honor, que por fuerza, tenacidad, capacidad o simple coincidencia se ganó. Hablo de la posición de privilegio que tiene Dante Delgado y su partido Movimiento Ciudadano. Por azares del destino o por así tenerlo proyectado, Dante se encuentra hoy por hoy como pieza clave en este rompecabezas político, y puede inclinar la balanza para un lado o para el otro, tanto a nivel federal como a nivel local (hablando de mi querido Puebla) e influir definitivamente en otras entidades de México.
Si Dante decide que MC juegue con la oposición y encima sigla al candidato, puede restarle al movimiento de López Obrador tanto en votos como en visibilidad, tendría una posición inmejorable al ser cabeza de la oposición.
Si Dante y su visión pragmática se mantiene sin alianzas, y ya que ha logrado tener liderazgos sólidos que suenan a presidenciables y aunque no ganasen arrastraría votación suficiente para impulsar candidaturas de menor calado como, regidurías, presidencias municipales, diputaciones locales y federales o senadurías, y por que no, hasta gubernaturas. Por supuesto, esto significaría una ganancia significativa dentro del panorama político para el partido.
Dante ha acuñado una frase que parece ser hasta metafórica… “ la Política no es, va siendo” y así va siendo la circunstancia a la que se adapta, a la que entiende y se cuela, esas cartas que le acompañan son tan polémicas como avasalladoras, Colosio, Lemus, el mismo tándem Samuel-Mariana, y hasta por que no, él mismo.
Ustedes ¿qué piensan?, será que las conversaciones entre amigos con una buena taza de café ahora también tendrán este componente.
Nos leemos en la próxima.
@ErikaSpezia